Timothy Alan Livingston, un estadounidense que fue hallado junto a dos niñas menores de edad en una habitación de hotel en Medellín, presuntamente en una escena de abuso sexual de menores, pudo salir de Colombia sin problemas pese a todas las pruebas encontradas y gracias a decenas de irregularidades en el operativo que no terminó en captura. Tristemente, este caso no es una novedad, sino una irregularidad: fue gracias a la alerta de unos testigos que se reveló este crímen pero centenares pasan inadvertidos e impera una impunidad rampante. ¿Por qué un extranjero logra fugarse tan fácilmente? ¿cómo operan las redes del mal llamado 'turismo sexual' en Medellín y en el país? Hablamos con la ONG Valientes Colombia, que reporta los casos e intenta llevar una conversación jurídica necesaria. ¿Por qué siguen ocurriendo estos delitos?

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