Tras las vacaciones de Semana Santa regresa la rutina, los niños vuelven al cole y los que más van a agradecer esa vuelta a la normalidad son los más mayores, los abuelos y abuelas, que en la mayoría de las familias españolas cuidan de sus nietos mientras los padres trabajan. Se estima que en España, cerca del 35% de los mayores de 65 años se dedican al cuidado de sus nietos varios días a la semana. Las abuelas atienden a sus nietos diariamente 6,2 horas al día y los abuelos las siguen de cerca, con una dedicación de 5,3 horas al día. Es decir, ese "trabajo invisible" equivale casi a una jornada laboral. En Hungría o Alemania ya tienen establecidas modificaciones fiscales para los abuelos que cuidan a sus nietos. De hecho, es algo que se baraja desde hace tiempo en el país, establecer una medida de este tipo para ayudar a los abuelos económicamente. Las estadísticas nos ofrecen datos abrumadores de la cantidad de abuelos para los que el cuidado de sus nietos ha llegado a pasar de ser una actividad ocasional a una labor obligatoria y no remunerada, que ocupa toda o gran parte de su vida social y que aparte de cuidarlos, ayudarlos con las tareas de la escuela y llevarlos al médico, muchas veces hasta sufragan sus gastos. En una sociedad donde la conciliación laboral y familiar se convierte en un desafío cada vez mayor, el rol de los abuelos como cuidadores principales de sus nietos ha cobrado un protagonismo destacado. Hablamos con Esther Camacho, neuropsicóloga del grupo de envejecimiento de la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología. Camacho señala que muchos abuelos experimentan problemas como sobrecarga, estrés y agotamiento debido al cuidado de sus nietos, lo que puede tener consecuencias negativas en su salud emocional y física. La falta de reconocimiento por parte de la familia y el exceso de normas y responsabilidades añadidas complican aún más la situación, llevando a muchos abuelos a sentirse desbordados y fuera de control. Este fenómeno no es casualidad, sino que está influenciado por factores demográficos y socioeconómicos, como el aumento de la esperanza de vida y la precariedad laboral. Una sentencia judicial pionera en Pontevedra obliga a los padres a pagar una pensión alimenticia a los abuelos cuidadores y resalta la importancia de reconocer y apoyar esta labor. En medio de este panorama, se plantea la necesidad de encontrar un equilibrio entre el cuidado de los nietos y otras responsabilidades. La experta destaca la importancia de que los mayores aprendan a establecer límites y decir "no" cuando sea necesario. Además, sugieren soluciones como modificaciones fiscales para los abuelos cuidadores, que podrían ayudar a aliviar la carga financiera y facilitar la conciliación familiar. A pesar de los desafíos, el cuidado de los nietos también trae consigo aspectos positivos, como el sentimiento de utilidad, alegría y rejuvenecimiento que proporciona a los abuelos. Camacho subraya la importancia de abordar este cuidado desde el respeto, el cariño y el equilibrio emocional, buscando siempre el bienestar tanto de los mayores como de los niños. El papel de los abuelos como cuidadores principales es fundamental en la sociedad contemporánea, pero requiere un reconocimiento adecuado y el apoyo necesario para garantizar su bienestar emocional y físico, así como el de sus nietos.See
omnystudio.com/listener for privacy information.
Commenti