Una granada marcó la vida de Álvaro Obregón el 3 de junio de 1915, mucho antes de que se convirtiera en presidente de México. Fue en una batalla en la hacienda de Santa Ana del Conde, en León, Guanajuato, cuando fue alcanzado por el proyectil que terminó por desprenderle la extremidad. Tres años después de esto nació Luis Aguilar, quien además de convertirse en uno de los actores más importantes de la época dorada del cine mexicano, estaba destinado a convertirse en amigo del futuro presidente de México.