Generalmente, no se habla del chakra del ombligo en la bibliografía tradicional de la India acerca de los chakras. Sin embargo, en el México antiguo se hablaba acerca del ombligo como centro de poder. Después de muchos años de experiencia y práctica terapéutica, Marián de Llaca pudo observar que la energía del ombligo era sumamente importante para entender procesos que atravesaban los pacientes, como cambios de casa, de país, cirugías estéticas, duelos importantes. 

A nivel energético, nuestro ombligo sigue unido a la energía de nuestra madre y nuestro padre. Los padres sienten a los hijos, lo que les pasa, no importa la distancia y también ocurre al revés, los hijos pueden sentir a la distancia, lo que le está ocurriendo a los padres.La energía del ombligo no sólo se dirige a la madre y al padre, sino también a la tierra. Ella es la que nos da el sentido de pertenencia, de sustento. Esto nos lo da el lugar donde nacemos. Es por ellos que cuando nos mudamos de casa o de país, no solo se mueve la energía de nuestros pies y piernas, sino también la del ombligo. 

Todos los seres vivientes tienen un ombligo diferente, es nuestro código de barras, y en él está guardada la energía que nutre nuestra misión y propósito de vida. No es una cicatriz que nos queda por accidente, es la marca que nos hace ser humanos, ser terrícolas. El ombligo, además, está totalmente vinculado al alma. 

¿Cómo podemos cuidar la energía de nuestro ombligo? ¡Escucha este episodio para aprender sobre el Octavo Chakra!

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